Renuncias silenciosas en Bogotá: una mirada a la desmotivación en el trabajo.
Un estudio de la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico reveló que la renuncia silenciosa afecta al 22,9 % de los trabajadores en Bogotá, lo que equivale a casi uno de cada cuatro ocupados. Este fenómeno describe a personas que permanecen en su empleo, pero manifiestan insatisfacción o intención de cambiar de trabajo, reduciendo su compromiso laboral.
El informe señala que la mayor concentración de este comportamiento se presenta en personas de 29 a 49 años (54,9 %), seguidas por jóvenes de 15 a 28 años (25,9 %). Por nivel educativo, la renuncia silenciosa es más frecuente entre quienes tienen educación media (38,2 %) y universitaria (18,8 %), mientras que quienes cuentan con posgrado presentan la menor incidencia (7,9 %).
En términos sectoriales, los mayores volúmenes de renuncia silenciosa se encuentran en Comercio y reparación de vehículos, Administración pública y educación, y Actividades profesionales, científicas y técnicas. Sin embargo, las mayores proporciones dentro de cada sector se registran en Alojamiento y servicios de comida (32 %), Transporte (28,9 %) y Construcción (25,8 %).
El estudio muestra una fuerte relación entre desmotivación y precariedad laboral. Entre quienes están en renuncia silenciosa, el 48,2 % trabaja en informalidad, hay menor afiliación a salud (90,1 %) y una elevada presencia de contratos verbales (32,8 %). Esto refleja que la falta de estabilidad, protección social y oportunidades de desarrollo incrementa la desconexión laboral.
La principal razón para buscar un nuevo empleo es mejorar el uso de capacidades y formación (77,8 %), por encima de la búsqueda de mejores ingresos (20,2 %).
Aunque el fenómeno está presente, Bogotá registra niveles menores que regiones como Europa, Asia Oriental o Estados Unidos. El informe concluye que mejorar la calidad del empleo, la formalización y la estabilidad contractual es clave para enfrentar esta tendencia y fortalecer el compromiso laboral en la ciudad.
