.- La poeta y edilesa Deyanira Rodríguez (Berardinelli) presenta su poemario “Versos de primavera en otoño”
Tras interpretar canciones de la inolvidable Edith Piaf, representar a Colombia en la diplomacia, especializarse en la lengua y la cultura italiana, integrar el Grupo Vocal Pluma, medírsele a la comunicación social en el programa sabatino de variedades en PRIRADIOTV junto a su maestro Benjamín Losada Posada, musicalizar obras suyas y de terceros, estudiar las necesidades y potencialidades de la localidad bogotana de Chapinero, en donde ejerce como edilesa, la poeta lírica Deyanira Rodríguez Barguil recopiló su producción de lustros en la obra “Versos de Primavera en Otoño”, que acaba de presentar en la Feria Internacional del Libro de Bogotá, al cual seguirán otros escenarios.
Una de sus composiciones, que disfrutamos en esta obra de la Fundación Veritas AID:
Libre
Quiero caminar
sin métrica
ni ritmo;
acompasada
por latidos
turbulentos,
arrítmicos,
fatigados.
Quiero caminar
por un sendero
libre cual
ausente viajera
evadida de un sueño.
Quiero caminar
a un paso
lento,
silente y fatigado,
con arribo al confín
de lo insondable
de lo obtuso
y abstracto
¡Quizás hacia
mi propio
tiempo fugitivo
en el pasado!
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Un mundo distinto, con la mirada de un poeta
Breve diálogo con la poeta:
¿Qué significa para usted la obra que está entregando, “Versos de primavera en Otoño”?
Para mí, el poemario «Versos de Primavera en Otoño» significa alcanzar un sueño, tal y como lo manifesté en las palabras introductorias del mismo. Es la fiel demostración que se puede florecer en el otoño de la vida.
¿De qué sirve escribir en poesía?
Escribir versos es activar con la lira la música sublime del alma.
¿Ha nacido poeta, o está aprendiendo a ser poeta?
Algunas personas nacen poetas en bruto. Evidentemente, es un arte que requiere ser perfeccionado con la práctica. Al menos, ese es mi caso. Lo que no excluye a poetas, cuyo prodigioso talento es innato.
¿Necesitamos los colombianos estar rodeados de poetas?
Sin duda ninguna. La poesía es la genuina expresión del alma. ¡Qué distinto sería el mundo si lo miráramos con la transparencia soñadora de un poeta!
Cuente de un verso que la haya cautivado…
El poema «Ojos claros, serenos» del poeta español Gutiérrez de Cetina.
Ojos, serenos, si de un dulce mirar sois alabados, ¿Por qué, si me miráis, me miráis airados?
¿Encuentra diferencias entre cantar y recitar?
Cuando el poema trae gran musicalidad consigo, basta poco esfuerzo para encontrarla. En mi opinión, muchas veces, las notas musicales le agregan un plus al poema.
Me gusta ver la expresión del rostro del poeta, cuando aprecia la fuerza de la palabra potenciada y elevada al pentagrama.
La obra de Deyanira Rodríguez está disponible a través de veritasaid@gmail.com, tel 57+3134241849